La generalización de dispositivos como el iPhone y el Blacberry y su uso en cualquier momento entorpece el trabajo diario de los ejecutivos.
Las múltiples funciones de los teléfonos “inteligentes”, por medio de los cuales se puede acceder a Internet, la casilla de correo electrónico y cualquier tipo de información en cualquier momento; ha llegado a volver tan pendientes a los ejecutivos que los utilizan, que su mismo trabajo ha sido afectado.
La disminución de la eficacia y la distracción del personal son dos de los efectos que ha relevado una encuesta de Yahoo! Hotjobs, cuyos expertos aseguran que “muchos ejecutivos ponen más atención al aparato que a una conversación o a una reunión de negocios”, provocando quejas en lugares de trabajo además pérdidas de tiempo y dinero.
“Ahora que los teléfonos inteligentes con acceso a internet se han vuelto más comunes, la gente cae cada vez más en la tentación de echar un vistazo al correo electrónico, al Facebook, al Twitter e incluso a ESPN.com”, señala Jane Wesman, ejecutiva en relaciones públicas y autora de publicaciones sobre tendencias tecnológicas; en un artículo publicado por Informador.