El Pleno del Senado ha aprobado este miércoles la reforma de la Ley General de Comunicación Audiovisual, que flexibiliza la gestión de las cadenas de televisión públicas autonómicas y abre la puerta a la entrada de empresas privadas en estos canales.
La reforma, que fue
enviada por el Gobierno por el trámite de urgencia, ha sido aprobada por el
Pleno del Senado con 157 votos a favor del PP y UPN, 86 votos en contra del
resto de grupos y la abstención de 5 senadores. Asimismo, el PP ha hecho valer
su mayoría para rechazar los tres vetos y 87 enmiendas que quedaban vivas del
resto de grupos.
La Ley, que modifica la
aprobada por el anterior Ejecutivo en 2010, permitirá a los gobiernos
autonómicos decidir qué hacen con sus televisiones autonómicas: si quieren
mantener o no este servicio y si quieren prestarlo directamente o encargar la
gestión a una empresa privada. En caso de quedarse con la gestión, no podrán
tener déficit porque "no se permitirán desequilibrios en los
presupuestos".
Hasta el momento, la
Comunidad Valenciana, Madrid y Castilla-La Mancha ya han avanzado su intención
de aprovechar la reforma del régimen de gestión de las televisiones autonómicas
aprobada por el Gobierno para privatizar la gestión o los servicios
informativos de sus televisiones públicas, mientras que otras comunidades ya
tienen 'de facto' algunos de los servicios de sus cadenas subcontratados a
empresas privadas.