Tras dos años de estar estancada, la Comisión Ocasional de Comunicación retomó el análisis del proyecto de Ley de Comunicación, acogiendo el mandato popular del pasado 7 de mayo cuando el pueblo ecuatoriano se pronunció a favor de la creación de un Consejo de Regulación para los medios de comunicación.
Las discusiones se retomaron en los últimos días, luego de que en reuniones previas la oposición logró que en la Comisión Ocasional de Comunicación se resolviera elaborar un segundo informe.
Pese a que la Asamblea Nacional se ha propuesto aprobar la nueva Ley de Comunicación en un plazo máximo de dos meses, las discrepancias en torno a los temas polémicos no han permitido avanzar en su trámite.
Así, mientras el Gobierno ha indicado que el objetivo del Consejo es regular los contenidos violentos y discriminatorios; sectores de la oposición y periodistas creen que existe un claro riesgo de atentar contra la libertad de expresión.
Como el debate no termina y no hay confianza, los asambleístas de la oposición han pedido la presencia de la relatora especial para la Libertad de Expresión de la OEA, Catalina Botero, pedido que aceptó el oficialismo siempre que no haga observaciones.
La Comisión de Comunicación aspira culminar con el informe para el segundo y definitivo debate de agosto.