La Asociación de Empresas de Telecomunicaciones de Ecuador (Asetel) estimó que 5% del Impuesto a los Consumos Especiales (ICE) que el Gobierno estudia imponer a la telefonía móvil generaría al fisco unos USD100 millones anuales.
Ese nivel de
ingresos se daría considerando una facturación anual de la telefonía móvil de
USD2.000 millones, aseguró Roberto Aspiazu, presidente de la Asociación, según publica El Universo.
En el país
existen tres operadoras móviles: Porta, marca comercial de Conecel, de
propiedad del mexicano Carlos Slim; Movistar, del grupo español Telefónica; y
Alegro, marca comercial de la estatal ecuatoriana Telecsa. Juntas sirven a un
mercado de 14,7 millones de abonados, siendo la primera la predominante con
70%, seguida de Movistar (28%) y Alegro (2%).
Es de
recordar que hasta finales del 2007, el usuario de móviles pagaba 15% de
impuesto. Luego, en enero del 2008 el Gobierno consideró el servicio como
público y básico, eliminando dicho impuesto, dejando al fisco ecuatoriano sin
percibier unos USD210 millones anuales.