La costumbre de ir al cine se ha revitalizado en el Perú al alcanzar, el año pasado, 17,2 millones de espectadores, muy por encima de las 3,4 millones asistencias logradas entre 1995 y 1996.
Hay muchos aspectos que son obvios en este resultado: mayor número de salas de cine, un precio por entrada que se adecuó a la economía de los peruanos y una oferta cada vez más agresiva de estrenos que han logrado que más público invierta su tiempo y se entregue a la fantasía del séptimo arte.
Marlon Manay, gerente general de Andes Films, distribuidora en el Perú de los estudios Disney y Sony, explica que el factor principales el ingreso del cine tridimensional (3D) que dio un nuevo aliento al sector logrando, por ejemplo, una curva de crecimiento de 17% el 2009, paradójicamente en un año de crisis.
El aporte del 3D no quedaría ahí, Álvaro Sedano, gerente comercial de Cineplanet, cree que la magia del 3D aún no ha alcanzado su mayor magnitud, la cual podría ser lograda en los próximos tres años con la inclusión de géneros como el cine de terror y ciencia ficción, que usarían este soporte.
Esto generaría algunos cuellos de botella en la proyección de película 3D. Este problema incluso se ha detectado este año considerando que varios multicines tuvieron que reducir el tiempo de proyección de algunas películas de cinco a tres semanas para poder incluir más títulos en la cartelera.
En ese sentido, el hecho de que un multicine tenga solo una sala de 3D resulta insuficiente.
Manay calcula que por el número de estrenos que se vienen en 3D los multicines tendrán casi la obligación de orientar hasta tres salas para proyectar filmes con esa característica, lo que se traducirá en una mayor inversión.
Por su parte, Mónica Ubillús, gerenta administrativa de UVK Multicines, indica que están orientando sus esfuerzos también a implementar el cine digital que, a diferencia del actual formato de 35 milímetros, permitiría más estrenos mundiales simultáneos.
Según manifiesta Ubillús, la inversión en tener una sala digital puede llegar a los USD200.000 y solo 25% de las 257 pantallas de Lima tienen esta tecnología.
Álvaro Sedano estima que convertir una sala digital requiere entre seis y siete veces el capital desembolsado en una de 35 mm. En el caso de Cineplanet han logrado que 19 salas tengan tecnología digital de las 121 que actualmente operan.
Sin embargo, la mayor inversión que están por desplegar estas empresas es en la construcción de multicines. En general, se estima que en los próximos dos años se abrirán alrededor de unas quince salas de cine, las cuales requerirían una inversión aproximada de USD40 millones, a ser desembolsados en Lima y en otras ciudades del país.
Vía El Comercio