Esto surge del informe “Telefonía móvil: Segmento individuos – 2011” realizado por Carrier y Asociados, 10% de los usuarios de telefonía móvil cuenta con un abono de datos, sin contar quienes usan servicios de datos bajo modalidad prepaga.
Entre principios del 2010 y mediados de 2011, entre
smartphones y teléfonos sociales se despacharon al mercado local algo más de 6
millones de terminales con capacidad para correr aplicaciones basadas en
Internet, como mail, redes sociales o mensajería instantánea (amén de navegar).
Muchos de éstos son vendidos con abonos que incluyen no sólo una determinada
cantidad de minutos de comunicación de voz y de SMS, sino también paquetes de
datos que servirán justamente para las aplicaciones mencionadas. Es por esto
que hoy un 10% de los usuarios de telefonía móvil cuenta con un abono de datos.
A esto hay que sumarle quienes usan servicios de datos bajo modalidad prepaga.
El crecimiento del consumo de datos se manifiesta
particularmente en el uso de aplicaciones de mensajería y socialización.
Tomando a las 5 aplicaciones más populares desde el celular, 4 corresponden a
la categoría mencionada: en primer lugar se ubica el mail (8%), seguido de Facebook
(5%) que desplaza a la navegación (4%) al 3° lugar. Luego aparecen la
mensajería instantánea (BBM, Whatsapp, Messenger) y Twitter.
La relevancia y crecimiento del uso de aplicaciones basadas
en la comunicación textual proyecta nubarrones sobre un servicio fuerte para
las operadoras móviles como lo es el de los mensajes de texto. Es por esto que
no debería llamar la atención si en el corto a mediano plazo comienzan a surgir
paquetes de SMS más agresivos, pudiendo llegar incluso a tarifas planas para
este servicio.
El consumo de datos correlaciona claramente con el NSE
(nivel socio económico) e impacta con más fuerza en los jóvenes. Se trata de un
segmento de usuario con mayor disponibilidad de ingresos (muchos trabajan pero
viven con sus padres), una actitud más positiva respecto de la tecnología (por
el factor generacional) y con una modalidad de vida más errante (trabajo,
estudio y salidas) lo que le da un mayor valor a la posibilidad de estar
conectado y en contacto en cualquier momento y lugar. Ellos son en definitiva los
grandes impulsores del mercado